La violencia contra la fauna silvestre en Puerto Vallarta vuelve a estar en el centro de atención tras el hallazgo del cuerpo sin vida de un cocodrilo de casi tres metros de longitud durante la madrugada del sÔbado. Se trata del segundo ejemplar asesinado en lo que va del mes de julio, lo que ha generado preocupación entre ambientalistas y autoridades municipales.
De acuerdo con el parte oficial, elementos del Grupo Operativo TƔctico (GOT) realizaban un patrullaje preventivo poco despuƩs de la medianoche cuando recibieron un reporte sobre tres personas que supuestamente cargaban un cocodrilo y se escucharon detonaciones de arma de fuego.
Al llegar al sitio indicado, los oficiales encontraron un bulto sobre la calle. Al inspeccionarlo, descubrieron el cadÔver de un cocodrilo de 2.92 metros de largo, atado de las patas y del hocico, con heridas visibles en la cabeza. El animal ya no presentaba signos vitales, y en la zona no se localizó a ninguna persona en el momento.
Tras una búsqueda por los alrededores, los agentes ubicaron a dos hombres que no pudieron justificar su presencia en el Ôrea. Ambos fueron detenidos por una falta administrativa y puestos a disposición de las autoridades.
El caso fue turnado al Ministerio PĆŗblico Federal, que ordenó la apertura de la carpeta de investigación correspondiente. Asimismo, se solicitó que el cuerpo del cocodrilo fuera entregado al Departamento de EcologĆa municipal. Un biólogo acudió al lugar para trasladar al animal al campamento tortuguero de Boca de Tomates, donde se le practicarĆ” una necropsia para determinar con precisión la causa de muerte.
Este nuevo hecho se suma a otro caso ocurrido dĆas atrĆ”s, en el que tambiĆ©n se encontró un cocodrilo muerto en circunstancias similares. Para ambientalistas, la repetición de estos hechos en tan corto tiempo podrĆa estar revelando una preocupante tendencia de violencia contra esta especie protegida.
āLos cocodrilos cumplen una función fundamental en los ecosistemas de la región. Matar a uno de estos animales no solo es cruel, tambiĆ©n es un delitoā, seƱaló un representante de una asociación local dedicada a la conservación de fauna.
Puerto Vallarta, conocido por su biodiversidad y la cercanĆa de Ć”reas urbanas con manglares y cuerpos de agua, es hĆ”bitat natural de diversas especies silvestres, entre ellas el cocodrilo americano (Crocodylus acutus), que se encuentra bajo protección legal en MĆ©xico.
Con el crecimiento urbano y el aumento del turismo, los encuentros entre humanos y fauna silvestre son cada vez mÔs frecuentes. Sin embargo, las autoridades insisten en la importancia de respetar los espacios naturales y evitar cualquier acción que pueda afectar el equilibrio ecológico.
āPuerto Vallarta no solo es un destino turĆstico, es un entorno natural compartido con muchas especies que tambiĆ©n tienen derecho a existir y desarrollarse en pazā, expresó un funcionario del municipio.
Las autoridades exhortaron nuevamente a la población a reportar cualquier acto de caza ilegal o maltrato hacia animales silvestres, y recordaron que el maltrato o asesinato de especies protegidas puede ser sancionado con multas severas e incluso prisión.
El caso sigue bajo investigación, y se espera que el resultado de la necropsia aporte mÔs elementos para definir las responsabilidades penales de los detenidos y prevenir futuros incidentes similares.