Autoridades de Cancún intensificaron esta semana las labores de limpieza de playas, retirando 40 toneladas de sargazo en un solo día de Playa Chac Mool, una de las cifras más altas registradas en lo que va del año.
El operativo forma parte de una estrategia local más agresiva para mantener las playas limpias ante la llegada masiva de sargazo. La presidenta municipal, Ana Paty Peralta, confirmó el despliegue reforzado de brigadas y maquinaria en la zona hotelera, y aseguró que el compromiso con el turismo es firme.
“No vamos a detenernos. Cancún necesita playas limpias”, dijo Peralta durante una supervisión en Playa Chac Mool, donde observó personalmente las maniobras de recolección.
Actualmente, más de 300 personas participan diariamente en la recolección del alga. Las cuadrillas utilizan herramientas manuales y maquinaria pesada para cargar el sargazo en camiones que lo trasladan a zonas de disposición final. El operativo es coordinado entre dependencias municipales, agencias estatales y contratistas privados.
Esta limpieza representa un esfuerzo reforzado ante el aumento en la acumulación de sargazo y la preocupación creciente del sector hotelero. Empresarios turísticos aseguran que la presencia masiva del alga está afectando las reservaciones en plena temporada alta.
“Nunca lo habíamos visto así de grave tan temprano en el año”, dijo Carlos Méndez, gerente de un hotel frente al mar. “Si sigue así, vamos a perder huéspedes”.
Investigadores del Instituto de Ciencias del Mar y Limnología de la UNAM advierten que 2025 podría ser el año con mayor llegada de sargazo en la historia. Un gigantesco cinturón de sargazo, visible vía satélite, avanza desde las costas de África hacia el Caribe, y se estima que el volumen podría superar las 500 mil toneladas.
Por su parte, autoridades federales manejan una previsión más baja, con una posible llegada de 60 mil toneladas al litoral mexicano. Sin embargo, el gobierno federal ya activó planes para interceptar el sargazo en altamar y está acelerando la construcción de una planta de biogás en Quintana Roo para procesar el alga recolectada.
La estrategia local en Cancún responde al reconocimiento de que esperar apoyo federal no basta. Con más arribazones esperadas en las próximas semanas, las autoridades municipales aseguran que los trabajos de limpieza se mantendrán y se ampliarán.
Organizaciones ambientales advierten que el problema va más allá de una simple recolección diaria. Aunque el sargazo tiene una función ecológica en el mar, su descomposición en la costa emite gases nocivos, desprende olores fétidos y amenaza los sitios de anidación de tortugas.
“Esto ya no es una molestia estacional”, dijo la bióloga Daniela Sánchez, de un grupo local de conservación marina. “Es una amenaza permanente para el ecosistema costero”.
Las playas son uno de los mayores activos económicos de Cancún, atrayendo a millones de turistas cada año. Con el sector en riesgo, la presión sobre el gobierno local no da tregua.
Por ahora, el mensaje desde el Ayuntamiento es contundente: la limpieza no se detiene.
“Trabajamos todos los días”, reiteró Peralta. “Nuestras playas deben mantenerse abiertas y limpias”.